Resolución de Renuncia (Adiós en silencio, Angel Mío)

Siendo las 2:55am del miércoles 20 de agosto del año 2008, en las cercanías del Sacred Tree, cumpliendo con los requisitos del Manifiesto y haciendo uso de mis atribuciones, declaro:

Queridos compañeros Eiffel:

Les quiero dedicar estas palabras a todos... a cada uno de ustedes, seres especiales y grandiosos, ahora que el momento de pasar la página ha llegado. Hemos vivido y convivido experiencias maravillosas... desagrados... dolores... sustos. Alegrías, dicha, orgullo. Ha sido con ustedes que he descubierto el sentido de la amistad, de la entrega sin barreras a los ideales que proclamamos un día juntos y que se convirtieron en bandera de nuestra batalla contra la injusticia y la falta de felicidad.

Todas esas experiencias fueron geniales, bellas e irrepetibles. Momentos que me recordaron lo que es ser niño, inocente y maduro a la vez. Con ustedes retomé la confianza en la gente, en la verdad, y me convertí de nuevo en una persona optimista y valiente.

Con algunos aprendí a bailar y a beber... Con otros a ver en la inocencia una virtud. Con otros desarrollé mi tolerancia a las cosas que no me gustan y recordé lo bien que se siente reírse de si mismo.

Debo pedir perdón por mis errores. Algunas veces no fui un Gran Maestre correcto. No me porté bien con todos... Ni dí lo mejor de mi para con todos. Me arrepiento de ello y les entrego mis disculpas. Cuando lo hice, fue más por mis defectos, humanos, que por malas intenciones. A todos los he querido como el niño grande que soy, y así seguirá siendo.

Sin embargo, como ya les he explicado, llega el momento de decir adiós, de rectificar y de ver con nostalgia los viejos tiempos. Llega el momento de dar un paso adelante y dejar las cosas que pasaron atrás, viéndolas con cariño y reflexión.

Me despido del Eiffel Team con todo el afecto que les tengo y que les tendré, de lejos. Pasan cosas que escapan de nuestras manos, y aunque haga el intento de ignorarlas os confieso que soy débil ante los tsunamis emocionales. No puedo permanecer al frente del Eiffel Team porque no me siento fuerte... Ni capaz de ser aunque sea hipotéticamente su amigo superior. No puedo, por más que así lo desee, seguir a su lado en la batalla, porque ahora mis batallas son otras.

Guerras que debo librar contra mi mismo y contra cosas que siempre me acompañan, aunque intente yo lo contrario. Ellas merecen toda mi atención, así como la merecen ustedes, y me es imposible no ocuparme de mi propia felicidad a pesar de querer compartir mil noches más de alegría con ustedes, un millón de gritos de terror, segundos de risas explotadas.

La felicidad es el norte supremo de un Eiffel, y así debería seguir siendo. Los invito a seguir siendo seres de bien, a divertirse relajadamente como saben hacer y a prender de los errores que hemos cometido juntos. Un Eiffel quiere ser grande de sabiduría, nunca lo olviden.

Fueron maravillosos conmigo, todos.

Verónica, eres explosivamente tú. Nunca congeniamos en un nivel pleno, por mis tonterías y por tus dudas infundadas. Te quiero, y te dejo como enseñanza la siguiente verdad: Eres grande en amor, amate a ti misma como amas a los demás y abandona toda duda emocional sobre los otros. Serás feliz apenas te des cuenta que tú misma saboteas tu felicidad. Un abrazo, mi canillitah.

Isis... ¿Qué debo decirte que no sepas? Fuiste mi aliada, mi chiste, mi informante y mi mano derecha en los asuntos de los Eiffel. Eres una persona con una fuerza interna que dinamita todo lo que tiene a su paso. Enfoca tu energía en ser feliz y en hacer feliz a los demás. Sé más puntual y considerada y sigue teniendo como arma tu honestidad y tu corazón. Contigo viví noches que jamás olvidaré. Gracias por absolutamente todo, amor mío. ¡A triunfar!

Katherine. Mi pequeña Katherine. El bebé del team, la diva de la vida. Tu ternura es tu fuerza, tu facultad tu mayor arma. Sigue siendo feliz, soporta las pruebas duras que te pone la vida a tan corta edad y sonríe, siempre sonríe, porque cuando lo haces nadie se resiste a tus encantos. Adelante, siempre adelante y erguida, mi Miss Distrito Capital 2010. Gracias por apoyarme y perdóname lo malo.

Toblerone... Oh, hijo mio. Te dejo huérfano, y he sido un pésimo padre. Eres un principiante, en todos los sentidos que le puedas dar a la palabra. Aprovecha tu inocencia para explotar las sorpresas que te guarda la vida, pero nunca olvides que la vida, siendo como nosotros somos, es doblemente difícil. Sufrirás, llorarás, reirás y amarás. Todo junto, todo rápido, todo doloroso. Aprende, y lucha. La vida te espera... arriésgate!

Ann... No te conocí lo suficiente, pero a pesar de la poca y viciada información sobre ti, dejaste una buena impresión en mi. He oído que tu vida es complicada, en cuanto a lo familiar. Lo será aún más sabiendo cómo es todo. Te invito a tener fuerza, a soportar y aprender de cada golpe que te da la vida. Venimos aquí a pelear, pues pelea. Eres todo lo que quieras ser, y más. Un abrazo, novia de una noche.

Luz... No sé si lo sabes, pero en cuanto te conocí le comenté a los demás lo bien que me caíste. Tienes cara de ser auténtica, sencilla y de confianza. Apareciste poco, pero siempre fuiste una auténtica Eiffel para mí. Todo lo que representamos, todo lo que podemos. Adelante... Adelante que tú puedes.

A todos me los llevo en el corazón y a todos les deseo el mayor de los éxitos: La felicidad, la sabiduría, y la paz consigo mismos. Es por eso que me separaré definitivamente de sus vidas, porque no me siento capaz de ayudarlos, de ser todo lo que quiero ser por ustedes. Eso lo lamento profundamente, pero las cosas que han sucedido me han cambiado por completo... Y debo reconstruir mi propio yo antes de poder ser bueno con mis amigos, mis hermanos Eiffel.

Cada segundo bajo el Árbol Sagrado, en El Palacio de Las Rayas y en cualquier sitio, estarán por siempre en mí, en mi amor y en mi deseo de que se repitan, si no ahora, cuando nos volvamos a encontrar y la vida no sea tan triste como lo es hoy en día. El árbol seguirá siendo símbolo de lo fuerte que me sentí con ustedes, de mis ganas de verlos a diario y de ayudarlos en todo. El árbol creció en mi... Y ahí seguirá, porque los quiero a todos de una manera que mis palabras no son dignas de expresar.

La presente es mi renuncia oficial al cargo de Gran Maestre de los Eiffel y mi separación irrevocable de la alianza conformada aquel día. A partir de su publicación, entra en efecto y se hace definitiva.

Eiffel es más que un Team... Es una manera de ser... Un pensamiento. No lo dejen morir, compañeros mios. ¡Vivan y disfruten cada momento!

Hágase, Cúmplase, Incompréndase y Envídiese,

Jav "The Rainbow Pride Boy"

Gran Maestre del Eiffel Team