sábado, 29 de noviembre de 2008

The Kingdom Strikes Back

¡Oh, la navidad, finalmente llegará la navidad! Se acercan las vacaciones de diciembre, y con ellas el momento de perdonar y de proponerse comenzar todo de nuevo. Pero todavía es noviembre y puedo, una vez más, dejar las cosas claras y ubicar a quien está perdido. Así que no se emocionen que aquí vamos.




En los últimos dos meses han ocurrido numerosos eventos que merece la pena reseñar en esta crónica. Eventos que, ya que tienen que ver directamente conmigo y mis planes, no tienen nada de normales ni de esperados. Ya sabrán ustedes que mi vida es simplemente una oda a la controversia, ¿No?




Fundamentalmente puedo decir que las cosas tomaron un giro inesperado y comenzó una nueva temporada. En ese sentido tengo dos reflexiones, primero, que a pesar de que se planeen todos los detalles, muchas cosas dependerán directamente de la anarquía cósmica; segundo; más que una reflexión es un descubrimiento: lo que no esperas puede ser justamente lo que estabas necesitando.




Un VIP - Top Friend tendrá un rol decisivo en los capítulos que vienen en esta nueva temporada. Debo comentarles que él ingresó a mi vida justo en el momento en el que todo lo que yo daba por sentado se desmoronó, dejándome en un limbo emocional y físico como nunca antes en diecinueve años. Él llegó de la manera menos esperada y supo convertirse rápidamente en una de las personas más importantes para que mi estabilidad no resulte afectada. Hace poco le comenté lo importante que él es y el nuevo significado que tiene para mí su presencia. Siendo este año una mezcla variopinta de experiencias amorosas fracasadas, tengo la absoluta seguridad de que con su respuesta (a la que él calificó de mal redactada por estar bajo los efectos del shock) se convirtió automáticamente en el chamo más recontrajodidamente genial que me ha gustado en 11 meses. Y todos sabemos lo que eso significa. Sólo puedo decir que estoy más que agradecido de haberle conocido, de contar con él y de ser parte de su vida. Lo elegí para ir a Ítaca, y aceptó acompañarme. Quizá no de la manera que en este momento me gustaría, pero el hecho mismo de aceptar de manera tan especial mi invitación lo hace merecedor del Best Crush Award 2008. Et voilá! Esperemos por la evolución...




Por otra parte les comento que este último mes también significó para muchas personas el comenzar a conocerme de verdad. Casi no quedan amigas y amigos heterosexuales que no sepan que soy gay. Más allá de la fiebre por salir del closet, esto me ha servido para refundar las bases de muchas relaciones para así descubrir que la verdad nos hace libres. Quizá no todo es perfecto, pero sí que con esto se acerca bastante. Incluso en la UCAB las cosas han mejorado a niveles insospechados. Agradezco a mis amigas y amigos por tan buen recibimiento y reformulo mi propuesta: ahora que lo saben, seamos mejores que antes, ahora que lo saben, no tenemos excusas. Closets are for clothes, ok?




La lealtad. Ya me cansa tener que hablar de ella de nuevo y en el mismo lugar. Si algunos no han entendido que conmigo funciona la regla del "All or nothing" pues deberían comenzar por trabajar su auto estima. Mi círculo más cercano (al que algunos han llamado "La Corte del Príncipe) debe serme totalmente fiel para que nuestra relación funcione, ni más ni menos. La cuestión es que la lealtad implica una entrega total y mutua, y no una presencia únicamente mía. Si no eres parte de mi selecto, cerrado y exclusivo grupo de elegidos, es porque no tienes lo que se necesita. En algunos casos estas expulsiones me causan tristeza, en otros, simplemente nostalgia. Podría enumerar una cantidad enorme de defectos que algunas personas tienen y que las convierten en portadoras de lo que denomino "el mal de los grises", pero simplemente me limitaré a que ustedes mismos analicen por qué algunos son elegidos y por qué algunos ni siquiera gozan del don de mi palabra. El punto es que si bien puedo perdonar errores, jamás toleraré que se me exija compartir terreno con el enemigo. Bienvenidos todos los que tengan el valor de entrar en La Corte, saludos cordiales a aquellos que se vieron forzosamente expulsados de ella. We can't help to be beautiful dirty rich.




Eso me lleva a pensar otra vez en el valor de la amistad verdadera, absoluta y sincera. Angelo, Ruth, Rosa, Daniel, Daniel, Daniel, Chesco, Angel... Ustedes representan lo más cercano a una familia elegida. Toleramos nuestras fallas porque sabemos que mientras que otros mueren por ser como somos, nosotros nos encargamos de que nuestras fallas afecten sólo a los que no son lo suficientemente fuertes para aceptar que en todo siempre debe haber un vencedor, y que nosotros hemos elegido pertenecer a las fuerzas del triunfo. Nuevamente uso este espacio para agradecerles su presencia y para confirmar mi respeto por lo que hemos fundado.






Un aplauso para todos aquellos camaradas que siguiendo mi ejemplo salieron del closet en lo que va de año y comenzaron a vivir un comienzo de verdadera libertad. Son ustedes la esperanza del mañana, la representación de la valentía y el orgullo hecho hombres. Sigamos adelante trabajando por nuestros derechos y por la igualdad. Cuenten conmigo para todo.




Gracias a Dios somos una Monarquía y no una República... Quizá si todos pudieran pertenecer a nuestra corte, ganarían ellos también en 17 estados... ¿no? Pues no, la corte no es democrática... Y la verdad es que eso nos encanta, ¿Cierto?






Be who you are and say what you feel, because those who mind don't matter and those who matter don't mind.
Dr. Seuss




Be careful, bitches, Santa is comming to town.





Prince Javier
Gay by Nature, Absolutely Fabulous By Choice




lunes, 10 de noviembre de 2008

Better the devil that you know, your love for me will grow

Estoy sentado en un banco de mi parque, el parque que una vez conocí con otros y que hoy es sólo mío. Enciendo un Black Virginia Slim e inhalo con placer culpable ese veneno gaseoso que penetra, como el frío de la noche, en mis pulmones. Recordando cada momento, visualizando cada escena, proclamando libertad.


Suena mi celular y es este muchacho de nuevo... Su insistencia comienza a molestarme, coño, que creí haber sido claro cuando le dije que no me llamara más. Quizá ya no entiende lo que significa un one night stand. Pasa un carro tukkie con un reggaetón estruendoso, interrumpiendo así mi falsa atmósfera de primer mundismo nocturno. Me molesta, pero olvido rápido el asunto y decido escribirle al otro, el que sí me gusta pero no lo sabe, al menos no oficialmente. "Mensaje enviado"... Carajo, ¿Será que fui muy obvio?


Por mi mente se diluyen mil imágenes del pasado con mil ideas del presente absoluto, la música que oí en Copas y en Triskel, los momentos más absurdos tras una canción, la relajación completa producida por el mareo y el cansancio, el desacato paradójico a mis principios convertido en la norma de una noche de experimentos. Qué estupidez, pienso, no es probable que me vaya bien con él, pero me gusta. El otro lucía inofensivo... Pero no, me atrae... Yo sé que yo sí a él... And here we go again, vamos a jugar una noche más...


El cigarro ya está por la mitad, y suena de nuevo mi celular, esta vez es Angelo, pidiendo perdón por no despedirse de mi en el messenger. Dudoso, me pregunto si debo admitirle de una vez por todas que tiene razón y que siempre me ha gustado quien me gusta. No lo hago, y decido ignorar su mensaje. Sigo pensando, inhalo, exhalo humo corrupto, pensamientos malintencionados y perversos, ideas de poder completo y dominación.


Siempre me he jactado de mi manejo de la información, y es que el que crea que estar informado es un simple capricho, definitivamente está tan a punto de acabarse como mi cigarrillo. La información lo es todo. Decido manipular, una vez más, todas las situaciones a mi favor. Haré que este se moleste con el otro, y así el otro me confesará lo que necesito saber. Llamaré a aquel y le daré un dato, a cambio de una clave para mover de nuevo los hilos de titiritero que tan dóciles me han entregado. Tu relación depende de mí, tonto, no de lo que tú le ofrezcas. Y en este juego nadie gana... ni nadie se mueve sin que yo lo sepa primero.


Se acabó el cigarro, me levanto y me siento en el columpio a mecerme mientras decido si ellos dos durarán un día más o si debo darles un par de meses. Es probable que ni ellos mismos sepan que ambos me han dado tal control sobre sus vidas. Opto por olvidar el asunto y dedicarme a mí, y a mi problema con el niño que me gusta. Se me acelera el pulso al recordar la manera como bailamos... tan sensual y tímida. Me da rabia pensar que duró tan poco, me da ira recordar que mi atención fue robada. ¡Ah, pero si me respondió el mensaje! Sí, que ya sabía lo que estarías haciendo. Y no me importa, de verdad, pero no soy capaz de preguntarte otra cosa. Te sigo la conversación aparentando una normalidad que en realidad es muy fingida y te mando tu respuesta. Me levanto del columpio y me siento en la rueda, le doy un par de vueltas y enciendo otro Black Virginia Slim. Si sigo fumando alcanzaré a Angelo en nuestra carrera por el cáncer de pulmón.


Mi vista se enfoca en el árbol que corona al parque, y comienzo a recordar al otro individuo con quien siempre asocio mis estadías allí. Me molesta recordarlo pero aquí es inevitable, tanto como verlo un par de veces al día en la universidad a la que ahora él también asiste. ¿Qué fue lo que me contaron de él ayer? Ah, que anda de nuevo haciendo lo de siempre. Y es que no me extraña, la verdad, ahora nada de lo que me cuentan de él me extraña. Cada quién decide su destino, y cada quien decide a quien otorgarle permiso para limitar su libertad, pues de eso nadie escapa. Down, Down, Down, Down. ¿Puede alguien ir más bajo? ¡Coño! Me quemé con el cigarro. Decido que al llegar a casa quizá haga un par de llamadas para manipular, también, esa situación. Después de todo aún no he cobrado ese despido, y mi indemnización exige ser bastante alta.


Inhalo. Ahora estoy caminando en círculos a través del parque. Me llama mi hermana para preguntarme una tontería, pero no me molesto ni se lo digo. La trato divinamente, pues su afecto ahora es sincero, igual que sus comentarios sobre mi homosexualidad, a la que se ha adaptado maravillosamente. Me invita al McCafé, pues lo descubrió conmigo, y me dice que Ruth me llamó. Todo esto me hace olvidar al niñito de El Cigarral y me pongo a pensar en mi actual obsesión masculina. ¿Será que le digo...? No... Decido no decirle nada, al menos no por ahora.


Me tiro en la grama, pues ya se me apagó el cigarro. Miro a las estrellas y me vienen a la mente dos historias que tienen que ver con ellas, con el parque, y con el frío que tengo. Christian y Rodolfo, dos miembros del staff del pasado... Corrección, Rodolfo nunca será del pasado, aunque tampoco será del futuro... Nueva corrección, nunca seremos del futuro. No juntos, jamás. Christian tiene más que ver con el parque que Rodo, pero Christian me da asco y Rodo no. Recuerdo que estoy peleado con él y me abstengo de escribirle también. Por un momento me asusto de lo desatado que ando, escribiéndole a cuatro a la vez... Pero ese susto solo me dura unos segundos. Me contento con mi mismo y enciendo otro Virginia.


El muchacho me responde, quedo con él para el día siguiente y no le escribo más. Me atormenta saber que quizá se esté dando cuenta de lo mucho que me gusta y de lo poco que me puedo controlar. Inhalo, y me acuerdo de algo que me tiene triste. Creí que otro, y este es el quinto de esta historia, me gustaba... Y no me gusta. No quiero lastimarlo, pero tampoco quiero fingir algo que no siento. Decido pedir consejo para que se olvide de mí. Le escribo a un polvo seguro, pero no me provoca tener sexo, así que lo dejo todo ahí pero con la posibilidad de una llamada y un don't ask - don't tell. Exhalo.


Me levanto nuevamente, y pienso en la necesidad de expresarle mi afecto a mi hermana, a Ruth, a Angelo, y a los Danieles. Quizá ellos no saben lo importantes que son, y lo que puede llegar a afectarme su ausencia. Quizá no saben, ellos menos mi hermana, que son mi familia callejera y que los quiero. Quizá no me doy cuenta que a veces abuso de mi poder... Quizá me preocupo demasiado. Inhalo, exhalo, culpa y placer, inhalo, exhalo, manipulación y amistad, inhalo, exhalo, poder y ambición, inhalo, exhalo... I'm never gonna stop.


Se está haciendo tarde y estoy totalmente paralizado por el frío. Por el frío, y por la necesidad tremenda de tenerlo cerca y quebrar el hielo de una vez por todas. Por el deseo de salir corriendo y olvidarme de toda la complicada historia que he creado, de la cual soy parte y que depende de mí para subsistir. Me paraliza también el recuerdo del pasado, de mi pasado, de lo que yo era, de lo que dejé de ser y de lo mucho que me asusta el descontrol con que manejo todo ahora.

Algunos celebran como soy, otros me odian por ello. Algunos me tienen en un pedestal y otros me quieren arrastrar al inframundo. Soy el diablo disfrazado de ángel, esperando por ti en las sombras. Nunca digan que no lo he advertido, nunca crean una mentira de un mentiroso, ni una verdad de un redimido. Yo soy como soy, y tu amor por mí crecerá y crecerá.


Me levanto, decidido a dejar el parque. Me detengo en la puerta, y me volteo para darle una última mirada. Tantos recuerdos... ¡Já! Me sonrío irónicamente y en mis ojos hay un destello luminoso de maldad. Del parque me iré cuando yo quiera irme... Ni antes, ni después. Love me or leave me, 'cause I'm never gonna stop, no no.


Cleopatra had her way
Matahari too
Whether they were good or bad
Is strictly up to you



Hasta pronto, ángeles.


Javier
"The Rainbow Pride Boy"
Gay by Nature, Absolutely Fabulous By Choice.